
Todo sobre el fondo de emergencia: del porque al cuanto
Durante mucho tiempo hemos escuchado a nuestros abuelos, padres e inclusive a amigos repetirnos hasta el cansancio que la vida está llena de vacas flacas y vacas gordas, y cuando ellos dicen que en la vida nada está escrito es porque en realidad nada lo está.
La vida está llena de sorpresas emocionales y económicas y aunque no las podamos prever, sí podemos estar preparados.
Sabias palabras que hemos escuchado durante toda nuestra vida esta implícita una de las mejores prácticas que existe en las finanzas personales: el fondo de emergencia.
El fondo de emergencia es un ahorro programado que hacen las personas para situaciones inesperadas que no están en el libreto y antes las cuales tenemos que reaccionar económicamente. Así mismo, trae consigo muchas preguntas que este articulo te ayudara a entender, desde el cómo organizarse para crearlo, cuánto dinero se tiene que poner en él, donde depositarlo, y sobre todo, como proteger el dinero.
Tomar la decisión de un fondo de emergencia
Este, sin lugar a dudas, es el paso más importante de todos. Crear la cultura de ahorro y tomar la decisión de guardar el dinero y crear un bolsillo destinado únicamente a futuras emergencias e imprevisto es una sabia decisión, pues nos aleja el día de mañana de hacer malabares para resolver emergencias.
Tomar la decisión puede sonar obvio como primer paso, pero aún en nuestro país no lo hacemos y tan solo uno de cada diez colombianos ahorra.
¿Cuánto dinero ahorrado necesita un fondo de emergencia?
Aunque no hay una regla sobre cuánto dinero se debe tener disponible en este fondo, si hay algunas recomendaciones a tener en cuenta sobre la cantidad de dinero que debemos tener ahorrado:
La Ley de Murphy es clara al decir que "Si algo malo puede pasar, pasará" y más aún, mentiríamos si dijéramos que somos inmunes a las emergencias que puedan llegar en el futuro. Ahora, la primera recomendación va en sintonía con esto y sobre el riesgo y el tamaño de las emergencias que tengamos hacia adelante.
Si lo tuviésemos que poner en palabras diríamos dime cuál es tu riesgo y te diré cuanto ahorrar. Por ejemplo, si somos emprendedores: ¿cuánto dinero necesitaríamos para vivir antes de que llegue nuestro próximo pago?, si somos empleados y en caso de perder el empleo: ¿cuánto dinero debería tener para costear lo básico? Actuar siempre pensando en el riesgo futuro nos permitirá definir el monto del ahorro.
Ahora algunos expertos aseguran que el fondo de emergencia debería actuar bajo la lógica del "1-3" donde los ingresos mensuales deben multiplicarse por tres, es decir que si ganas 2 millones de pesos, tu fondo de emergencia debe corresponder a 6 millones. Sin embargo, en cualquiera de los dos escenarios existe la misma complejidad:
¿cómo llegar a tener ese dinero ahorrado?
¿Como hacer del fondo de emergencia una realidad?
Si hay algo cierto es que ahorrar no es una tarea sencilla, sin embargo, existen tres palabras claves que nos pueden ayudar a volver realidad nuestro fondo de ahorro: planeación, disciplina y hábito.
Planeación
Es algo que no nos enseñan en las universidades (a menos de que estudiemos economía, contaduría, finanzas o administración), pero si es algo que aprendemos en la vida. La planeación de las finanzas personales lo es todo pues hace, que tengamos un diagnóstico y un conocimiento exacto de cuánto dinero nos entra y cuánto dinero se nos va. Conocer esto en detalle nos va a permitir identificar el monto de dinero mensual del que se puede disponer para el ahorro o inclusive saber de qué gastos se puede prescindir para ahorrar mucho más.
Disciplina
Una vez sepamos cuales son nuestros ingresos, cuanto de este dinero se va mensualmente en gastos y cuánto dinero estamos en capacidad de ahorrar, es hora de ser estrictos y disciplinados con ese presupuesto. La clave es convertir nuestras finanzas en un reloj suizo que mes a mes se mueve con precisión. Recuerda que salirnos de ese presupuesto mensual que hemos hecho con la planeación nos alejará de nuestro objetivo.
Hábito
Esta es la cereza del pastel, crear el hábito nos va a permitir conseguir nuestro objetivo. La clave es que ese monto de dinero que nos sobra para ahorrar debemos verlo como una "obligación" mas, como una cuota mensual que pagaríamos mes a mes. Así como tenemos hábitos de pago, tenemos que tener un hábito de ahorro.
¿Dónde guardar el fondo de emergencia?
Antes nuestros abuelos guardaban el dinero en alcancías de barro e inclusive en el famoso y poco laureado debajo del colchón, sin embargo, hoy hay una serie de productos que permiten que no solo el dinero que ahorras esté seguro, sino que esté siempre disponible y que genere rentabilidad, es decir que tu dinero se multiplique.
Estos son algunos de los productos disponibles en el mercado:
- CDT
- Fondos de Inversión Colectiva
- Fondos de empleados
Seguir estos consejos te ayudará a convertir en realidad un fondo de emergencia para que el día de mañana, cuando lleguen las emergencias, estas no nos saquen unas canas de más.